Santo Tomás ya tuvo tres festivales del mango y de haber continuado este año fuera la versión 25

Hay que revivirlo como la sostiene en un escrito del estudiante y concejal de Santo Tomás, Vladimir Escorcia De la Hoz que también se publica en esta edición
En Santo Tomás se han realizado tres festivales del mango, una idea que nació del director de este portal, periodista Manuel Pérez Fruto y se asoció con otros dirigentes culturales y folclóricos de la época como Jorge Fontalvo Escorcia, Efrén Crescente Romero y los fallecidos Manuel Guillermo Berdugo Escorcia y Jorge León Castro.
Ese primer festival se llevó a cabo en el mes de junio del 2000, siendo alcalde Pedro Pastor Ariza Muñoz. El comité organizador escogió como reina central del festival a la jovencita Joyce Castillo Domínguez, quien más tarde participó en el Reinado Intermunicipal del Mango en Los Pendales, corregimiento de Luruaco, llevándose la corona de ese certamen.

El segundo festival fue en el 2001, comenzando el gobierno de Pedro Mejía De la Hoz, de quien recibimos muchas ayudas, hasta el punto que hicimos contacto con su tío Néstor Mejía Pizarro, quien era el director de la CRA y nos donó 100 árboles de mango, algunos de ellos los regalamos durante el festival y otros con la ayuda del alcalde y de este personaje se sembraron en la entrada del municipio y de ahí comenzó la siembra de mangos en Santo Tomás que se ganó el premio del “Pulmón Verde” del departamento del Atlántico.
En este festival se hizo un concurso de la persona que más comiera mango y el triunfo se lo llevó Armando Maldonado Sarmiento, quien devoró un total de 80 frutas.
Ese año la reina central del mango fue Milena Rodríguez Silva, quien repitió reinado intermunicipal en Los Pendales, llevándose la corona intermunicipal.
En ese festival que tuvo toda la ayuda del alcalde Pedro Mejía con esta fruta, aparte de hacer jugos se implementó el arroz con mango elaborado por la matrona tomasina Loida Maldonado Fontalvo, conocida cariñosamente como “La Yoya”, quien es dueña actual de un restaurante en la calle Independencia, cuya vivienda fue propiedad de sus abuelos.
También se hizo un concurso, el que más comiera mango. Hubo dos competidores, la abogada Alba Fruto Pertuz, quien se comió 50 y el abogado Mario Modesto Molinares Sarmiento, quien alcanzó a comerse 40, pero con tan mala suerte que en horas del mediodía de ese mismo domingo tuvo que ser llevado al hospital, donde gracias a Dios lo atendieron bien y regresó a su casa.
Con la colaboración de Néstor Muñoz Charris que laboraba en la empresa Aguardiente Antioqueño trajo en la noche de ese domingo de junio al cantante vallenato Dolcey Gutiérrez, quien animó la fiesta con una plaza llena de público.

El tercer festival se hizo el 2002, también como alcalde Pedro Mejía, siendo la reina central Maydelín Manotas Maldonado, quien de igual manera estuvo presente en el reinado intermunicipal del Mango en Los Pendales, ganándose el virreinato y nuestro reinado fue todo un éxito, por cuanto se trajeron frutos de Los Pendales más de 200 mangos y todos se vendieron al igual que el arroz con mango, los dulces y el jugo, pero por falta de apoyo al año siguiente se tuvo que suspender el evento y quedando pendientes todos estos años que pasaron.
Hay una intención de algunos personajes tomasinos, entre ellos el concejal Vladimir Escorcia que se reviva el festival, al igual que “El Chacho”, quien dijo que se prepare para este año pero habría que buscar el apoyo de la alcaldía de Santo Tomás y la misma Gobernación en cabeza de Eduardo Verano De la Rosa para que patrocine este festival que podría ser en el mes de junio próximo y si no se puede, prepararlo para el año entrante y ya no sería el primero sino el CUARTO FESTIVAL DEL MANGO, como ya se le conoce tradicionalmente.
SANTO TOMAS NECESITA UN FESTIVAL DEL MANGO (Y ALGO MAS)
Por VLADIMIR ESCORCIA DE LA HOZ

Santo Tomás es un pueblo que no necesita disfrazarse para brillar. Aquí, la alegría no se improvisa, se hereda.
Somos tierra de carnaval, de tambores que resuenan como el corazón del Caribe, y de gente que hace de lo cotidiano una fiesta. Pero, ¿por qué no tenemos aún un Festival del Mango que nos represente como merecemos?.
El mango no es solo una fruta en Santo Tomás, es un símbolo. Esta en las esquinas, en los patios, en los recreos de los niños, en la memoria de todos. Tanta abundancia y sabor merecen un homenaje y más allá de la fruta, lo que se necesita es un pretexto para celebrarnos como comunidad.
Un festival bien hecho no solo exalta una tradición, mueve la economía local de vitrina a los emprendedores, impulsa la cultura y fortalece el orgullo tomasino. Ya otros municipios del Atlántico lo han entendido ¿por qué nosotros no?.
Imagínese un fin de sema con ferias gastronómicas, concursos del mango más sabroso, talleres con abuelas haciendo dulce, reinas con coronas de hojas verdes y grupos folclóricos bailando bajo el sol. No solo sería una fiesta, sería un grito de identidad.
Santo Tomás tiene todo para brillar con su propio festival del mango. Solo falta lo más importante: creémoslo y empezar, porque un pueblo que se celebra a si mismo, es un pueblo que nunca se olvida, es el momento de ser la verdadera tierra de los verdes mangos.