22 noviembre, 2024

Grandes retos

Por Manuel Fontalvo

Para nadie es un secreto que la pandemia ha afectado todos los ámbitos de nuestras vidas a nivel local, nacional e internacional, y que dicha afectación ha golpeado a unos más que a otros en lo social, lo político, lo laboral, lo cultural y por supuesto lo económico.

En los últimos días se ha visto cómo se ha utilizado la pandemia como excusa por parte de los gremios empresariales para proponer el paupérrimo aumento del salario mínimo en un 2% como si los únicos afectados fueran ellos, entre otras cosas los que más recursos tienen.

Debido a lo anterior, y al hecho de que muchas personas perdieron sus empleos, se hace necesario mirar en otras direcciones para ponerle pecho a la actual crisis y a la que se ha de venir por concepto de las consecuencias de dicha pandemia.

Los mandatarios, ya sean nacionales, departamentales, distritales y municipales, tienen grandes retos en cuanto a darle posibilidades a la gente para superar los estragos causados por esta situación, al menos en la parte económica, es por eso que se deben trazar políticas que permitan que las personas aminoren el impacto causado por la crisis.

Centrándonos en el ambiente local, y que se puede dar en todos los ambientes, hay muchos tomasinos que se han reinventado y han puesto a funcionar su capacidad de adaptación montando negocios, o haciendo muchas actividades que les han permitido sobrevivir, esto es loable, pero también es cierto que no siempre se cuentan con los recursos y la preparación para que dichos emprendimientos terminen siendo exitosos.

Es por eso que las administraciones deben a corto plazo implementar programas tendientes a capacitar, acompañar y financiar los emprendimientos de todo aquel que tenga una idea de negocio.

Lo primero es reclutar a los emprendedores, que los hay en cantidad, a través de un programa, que entre otras cosas debe tener recursos establecidos dentro de los planes de desarrollo, una vez hecho lo anterior, implementar planes de capacitación en creación de empresas con todo lo que esto incurre, hacer el acompañamiento debido, y garantizar a través de la gestión ante las entidades correspondientes como secretaria de desarrollo departamental o ministerio de desarrollo, de los recursos que permitan el inicio de los negocios emprendidos y por consiguiente el desarrollo y éxito de los mismos.

Si se establece lo anterior como una política de cada administración y con la voluntad de todas las partes, podremos darles herramientas a muchas personas para salir de la informalidad, y por qué no a mediano plazo convertirse en microempresarios que estén en condición de generar empleo y calidad de vida tanto de su entorno familiar como el entorno de otros.

Garantizando lo anterior, podemos arrancarle al esclavismo de los empresarios y sus gremios, muchas personas que entre otras cosas les harán falta dentro de sus procesos productivos, al haber muchas personas independientes, se puede dar una escasez de mano de obra para ellos, lo cual conllevara a que deban pagar mejor para conseguir dicha mano de obra y así podremos evitar que nos quieran meter un 2% de aumento en el salario mínimo.

Queda en manos de los administradores locales y sus equipos de trabajo, el implementar los programas de los que hablo y colocar toda la voluntad para que éstos se den y tengan feliz término.

A largo plazo y que quede como política municipal, presentar un proyecto ante el concejo para que todas las administraciones tengan como obligación entregar un número determinado de microempresarios.

Dejo esto a la revisión de los lectores y que manifiesten sus ideas al respecto.

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