31 octubre, 2024

156 AÑOS EN ARAS DE LA TOLERANCIA Y LA LIBERTAD

Por JOSÉ MORALES MANCHEGO

La Sociedad Hermanos de la Caridad (S. H. C.), entidad sin ánimo de lucro, fue fundada el 9 de mayo de 1867 con el objeto de servir a la comunidad por cuantos medios legítimos estuvieran a su alcance, y sin discriminaciones de ninguna índole. Con ese objetivo, los grandes espíritus fundadores, propiciaron la creación de un Hospital de Caridad (Hospital de Barranquilla) para cuidar el cuerpo humano, que representaba para ellos un verdadero templo; propendieron por la construcción de una Iglesia (Iglesia del Rosario), para alimentar el alma, y crearon el Cementerio Universal para que el cuerpo descansara en paz, después de la muerte, mientras el espíritu volaba hacia el Valle de la Eternidad. Ellos, los fundadores, consideraban que es un deber cuidar el cuerpo “…antes que el polvo vuelva a la tierra de donde salió, y el espíritu vuele a Dios, que le dio el ser”. (Eclesiastés 12:7).Esas obras se adelantaron con los auxilios de la Nación, el Estado de Bolívar, el municipio de Barranquilla, las donaciones voluntarias de sus miembros y el concurso de distinguidas personalidades de ese entonces, (Para ampliar esta información, léase: Stevenson Samper, Adlai. “Barranquilla y el legado del padre Carlos Valiente”. Universidad del Norte. Barranquilla, 2013.- 130 pp). A lo largo de sus 156 años la S. H. C. ha brillado por su sentido social y sus valores fundamentales como la tolerancia, la solidaridad y el apoyo a la educación y la cultura. Algunas de las obras que la S. H. C. ha dado y sigue ofreciendo a Barranquilla son: Funeraria y Cementerio Universal, el panteón de mayor trascendencia histórica y arquitectónica de la ciudad; la Biblioteca Pública Julio Hoenigsberg y la Sede cultural José “Pepe” Stevenson Collante; El Misionero, revista laica donde fluye el pensamiento libre; el Poemario, donde se recoge la producción poética que aflora en el Gran Recital Arte in Memoriam, certamen anual que se realiza en el Cementerio Universal para rendir homenaje póstumo a un personaje destacado de la región. Además, la S. H. C. financia las ediciones periódicas de las revistas “Plancha Masónica”, de la Gran Logia del Norte de Colombia, y “Campamento”, del Supremo Consejo Neogranadino. Todas estas publicaciones son de circulación gratuita.Hoy, cuando celebramos 156 años de su existencia, vemos a las nuevas generaciones de la altruista institución, trabajando con una conciencia renovadora (abriendo espacios en medio de un mercado mucho más competitivo) para seguir marchando con los propios esfuerzos, sin tener que recurrir a los auxilios oficiales. Felicitaciones para estas nuevas generaciones que han sabido desarrollar la constelación de sueños de los fundadores, manteniendo su independencia y su autonomía, para evitar que la institución sea penetrada por intereses mezquinos y heterónomos, que le impidan el libre desarrollo de su naturaleza en aras de la libertad, la justicia y la equidad. Fraternalmente,JOSÉ MORALES MANCHEGO

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